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"Síntesis, ideas para compatir"

Made in China 2025, hacia dónde va?

Made in China 2025 y la riposta americana

Ronald Alvarez, PhD

De acuerdo con un documento estratégico de la Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCOC por sus siglas en inglés), el plan “Made in China 2025” (MIC 2025) es una hoja de ruta que apunta a transformar a China en un líder mundial en industrias estratégicas de manufactura, que incluyen tecnología de información de próxima generación, aviación, ferrocarriles, vehículos a base de nuevas energías y maquinaria agrícola, todas críticas para lograr competitividad y crecimiento en el siglo XXI. Una de las diferencias que se nota en este plan es que busca brindar acceso preferencial a recursos de capital a compañías chinas que quieran promover investigación interna, así como potenciar capacidades de desarrollo, fortalecer sus habilidades de adquisición de tecnología del exterior e intensificar sus competencias generales. En resumen, se trata de un plan que dispone recursos estatales para alterar y crear ventajas competitivas a empresas chinas, en los sectores señalados anteriormente, en una escala global, de acuerdo con USCOC.

Un aspecto a destacar del MIC 2025 es que se fortalece el papel controlador del gobierno central en lo referente a planificación económica y se aleja la perspectiva de dominio de los elementos claves del mercado que se habían establecido en las decisiones del Tercer Plenum. También sobresale la Intensificación de políticas preferenciales de apoyo financiero. Estos recursos se plantean para apalancar y favorecer compañías domésticas chinas en los sectores destacados, lo que probablemente pondrá al alcance de estas empresas, cientos de millones de Renminbis (RMB) en el transcurso de los próximos años, lo que, según USCOC, implicará “substanciales distorsiones” tanto a nivel del mercado doméstico chino como a nivel de los mercados globales.

La preocupación que levanta USCOC se debe no solo a la intervención en la economía doméstica china, sino también en las de sus socios económicos, por parte del Estado. El MIC 2025 apunta hacia el apalancamiento del poder del estado Chino de alterar las dinámicas competitivas en los mercados globales, en industrias que son fundamentales para la competitividad económica.

USCOC destaca las declaraciones que diera la ex Secretaria de Comercio, Penny Pritzker, en un discurso para el sector de semiconductores de China, en el Centro de Estrategia y Estudios Internacionales en el año 2016, quien indicó: “permítanme establecer lo obvio: esta interferencia del estado (del MIC 2025) sin precedentes podría distorsionar el mercado y socavar los ecosistemas de innovación. El mundo ha visto antes los efectos de este tipo de objetivos, interferencias conducidas por el estado… Los resultados han sido sobre-capacidad en el mercado que ha reducido precios artificialmente y ha causado daños significativos en las industrias a nivel global” (del original en inglés).

Las voces entre los gobiernos de Estados Unidos y China ya se han encendido. El viceministro de Finanzas de China, Zhu Guangyao, afirmó que las aspiraciones chinas de convertirse en líder mundial de manufactura son totalmente legítimas y que las acusaciones de Washington de que China está tratando de distorsionar el mercado son falsas y discriminatorias. Como ya se sabe, Estados Unidos ha respondido con barreras arancelarias, con respuestas similares de China. Ante una posible guerra comercial entre los dos gigantes, algunos analistas están viendo oportunidades para los mercados latinoamericanos, como es el caso de la industria de soja de Argentina y Brasil, que, al ser más competitivas ante nuevos aranceles impuestos a la soja de Estados Unidos, les permitiría capturar porciones adicionales del mercado chino. Otro ejemplo es el de los exportadores de carne de cerdo mexicanos hacia China, por razones similares. Y a medida que Estados Unidos riposte con más barreras arancelarias, se abrirán más oportunidades para otras industrias, como la de productos electrónicos producidos en México, con destino en Estados Unidos. En Chile, líder mundial en la producción de vinos, aunque ven una oportunidad en el corto plazo, por su capacidad de producir vinos a precios bajos, no lo ven sostenible en el largo plazo, dados los efectos negativos del proteccionismo. Esperamos que las turbulencias de los mercados no afecten a los jugadores pequeños como el caso de nuestro país, en donde a lo largo de los años, hemos tomado buenas decisiones con la firma de varios tratados bilaterales y multilaterales, lo que nos hará ganar tiempo con respecto a otros países que se han rezagado en esta estrategia. Esto nos permitirá buscar el sol donde mejor caliente y puede calentar muy lejos, por ejemplo, en China.